Gas renovable y renovación de equipos para avanzar en la descarbonización

Gas renovable y renovación de equipos para avanzar en la descarbonización

El sector de la calefacción, representado por  Sedigas, Conaif, Fegeca, CNI y Amascal ha hecho llegar a al Gobierno y las comunidades autónomas un documento en el que pone de manifiesto el importante papel que el gas renovable (hidrógeno, biometano y biogás) desempeña en la transición hacia la descarbonización en la edificación, la rehabilitación, la eficiencia energética y la reducción de las emisiones.

Los colectivos recuerdan que cada español emite en torno a siete toneladas anuales de gases contaminantes, de las cuales aproximadamente dos toneladas proceden de los diferentes sistemas de calefacción, y que en España, el más extendido  es el que utiliza el gas natural, que emite la mitad que los basados en carbón y ligeramente menos que los eléctricos (1,8 t frente a 2,1 t).

Otra de las medidas que proponen para seguir  avanzando en el objetivo de descarbonización, es el fomento de la renovación de aparatos obsoletos por equipos de condensación. Esta medida permitiría mejorar la seguridad y la eficiencia energética de las instalaciones en un 25%, reduciendo en un porcentaje aún mayor, el 35%, la emisión de CO2 a la atmósfera.

 

Distribución de gas renovable

Como explican las organizaciones,  España cuenta con una moderna red de distribución que ya está preparada para distribuir gas renovable (biometano) que no precisa realizar  ninguna adaptación en las instalaciones y equipos de los consumidores e incorporar hidrógeno en el medio plazo, por lo que «el impacto sobre la descarbonización sería inmediato e innegable».

En concreto,  el sector propone nueve medidas para reducir este impacto, que incluyen aspectos técnicos y empresariales:

  1. Aceleración del reemplazo de los equipos de calefacción individuales.
  2. Programa de sustitución e hibridación en instalaciones individuales y colectivas.
  3. Instalación de sistemas de control y automatización de instalaciones existentes.
  4. Campañas de comunicación sobre las ventajas económicas y ambientales de los sistemas de calefacción eficientes.
  5. Aplicación de IVA reducido para las instalaciones de alta eficiencia energética.
  6. Aplicación de desgravaciones fiscales.
  7. Plan de ayudas a la digitalización del sector de la calefacción y gas.
  8. Potenciación del tejido empresarial local en las licitaciones y concursos públicos.
  9. Formación del sector de las instalaciones en nuevas tecnologías y aplicaciones de los gases renovables.

Con todas estas propuestas los beneficios que se esperan se concretan en: reducción de las emisiones de CO2; mejora de la calidad del aire al reducir también las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y partículas; apoyo al desarrollo rural y la fijación de empleo; convertir a los ciudadanos en los protagonistas de la mejora medioambiental; y  un impacto homogéneo en todo el territorio nacional.

Para llevar a cabo estas actuaciones, las citadas organizaciones aluden a una serie de programas que facilitarían su viabilidad económica, como los Fondos Next Generation de la Unión Europea y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía (Plan España Puede) para el despegue y recuperación de la economía española.