Epyme cubrirá el 30% del consumo energético con su instalación de autoconsumo

Epyme cubrirá el 30% del consumo energético con su instalación de autoconsumo

Fiel a su compromiso con la sostenibilidad, Epyme ha apostado por el autoconsumo en su nueva sede social de Sevilla.  La Asociación ha incorporado una instalación compuesta por 28 paneles fotovoltaicos conectados a inversor con una potencia de 10 kilovatios.

La nueva instalación, formada por un total de 12,6 kWp, cubrirá el 30% del consumo del edificio. Para conseguir el máximo rendimiento de esta instalación, cada panel lleva conectado un optimizador de potencia del fabricante Solaredge. Unos dispositivos que fijan el punto de trabajo de cada panel de forma independiente y monitorizan, también de forma independiente, cada placa. Se trata de soluciones que aportan un valor añadido importante a cualquier instalación pero que, en este caso, se convierten en imprescindibles al existir elementos que proyectan sombras sobre la superficie de las placas.

Solución en edificios existentes

Los paneles se ubican en dos cubiertas del edificio y se conectan de forma independiente a un inversor de 10 kW nominales. Disponen de forma coplanar a la cubierta, manteniendo la misma orientación e inclinación. La disposición minimiza las cargas de viento sobre las placas y es la solución más recomendada para la instalación de paneles fotovoltaicos sobre edificios existentes.

La instalación generará electricidad renovable para los usos generales del propio edificio. La energía excedentaria se verterá a la red y se acogerá al mecanismo de compensación simplificada, según lo establecido en el RD244/2019.

La instalación, monitorizada por un software desde Epyme, produce energía para cubrir el 30% del consumo energético del nuevo edificio de la Asociación, consumiendo casi la totalidad de la energía que produce la instalación.

En un primer análisis, esta instalación permite obtener un ahorro de cercano a los 2.000 euros en los consumos, sin cuantificar todavía las compensaciones por vertido a red de la instalación. Eso equivale a un total de 220 árboles al año, teniendo en cuenta el impacto con respecto al ahorro de las emisiones de CO2.