Europa da luz verde a la inversión de 1.000 millones en proyectos de tecnologías limpias
La Comisión Europea ha dado luz verde a la primera convocatoria de propuestas del Fondo de Innovación, “uno de los mayores programas mundiales de demostración de tecnologías innovadoras con baja emisión de carbono”, confirman desde la propia UE.
Financiado con ingresos procedentes de la subasta de derechos del régimen de comercio de derechos de emisión comunitarios, este Fondo está destinado a incentivar tecnologías vanguardistas que permitan el impulso de las energías renovables, además de las industrias de gran consumo de energía, el almacenamiento de energía y la captura, el uso y el almacenamiento de carbono. El objetivo es contribuir a la recuperación verde mediante la creación de empleos locales con garantía de futuro, allanando el camino hacia la neutralidad climática y reforzando el liderazgo tecnológico europeo a escala mundial.
Proyectos comprometidos con la neutralidad climática
Para Frans Timmermans, vicepresidente primero, la convocatoria “llega en el momento preciso”, apoyando e incentivando “proyectos prometedores y listos para el mercado”, citando como ejemplos el hidrógeno limpio u otras soluciones con bajas emisiones de carbono para industrias con gran consumo de energía, como la siderurgia, la cementera y la química. Timmermans defendió también el apoyo al almacenamiento de energía, las soluciones para la red y la captura y almacenamiento de carbono, grandes inversiones que, a su juicio, “contribuirán a relanzar la economía de la UE y a poner en pie una recuperación verde que nos lleve a la neutralidad climática en 2050”.
Desde Bruselas contempla que el Fondo de Innovación destine alrededor de 10.000 millones de euros para el período 2020-2030, procedentes como se ha dicho de la subasta de derechos de emisión en el marco del régimen de comercio de derechos de emisión de la UE, además de los ingresos no desembolsados del predecesor del Fondo de Innovación, el programa NER 300.
Los 1.000 millones destinados a esta primera convocatoria aportará financiación a proyectos a gran escala para ayudarles a superar los riesgos vinculados a la comercialización y la demostración a gran escala, permitiendo que lleguen al mercado. En el caso de los proyectos prometedores que aún no están listos para el mercado, se ha reservado un presupuesto específico de 8 millones de euros para ayudarles en su desarrollo.
La convocatoria está abierta a proyectos en sectores admisibles de todos los Estados miembros de la UE, Islandia y Noruega, pudiendo utilizarse los fondos en cooperación con otras iniciativas de financiación pública, como ayudas estatales u otros programas de financiación de la UE. Y un apunte más en relación a los proyectos, que cerrará la recepción de convocatorias el próximo 29 de octubre, y es que se evaluarán en función de su potencial para evitar las emisiones de gases de efecto invernadero, potencial de innovación, madurez financiera y técnica, y potencial de expansión y rentabilidad.
